1. Pon a cocer los mejillones en una cazuela; tápalos y deja que se abran a fuego fuerte. Remuévelos un par de veces durante la cocción. Escúrrelos con un colador y reserva unas cucharadas del líquido de la cocción. Retírales las valvas y resérvalos.
2. Rehoga la cebolla picada en una cazuela de fondo grueso a fuego muy lento durante 12 minutos. Agrégale el ajo picado y las zanahorias troceadas. Cuécelo 2 minutos más, vierte el vermut, sube la intensidad del fuego y deja que se evapore durante unos instantes.
3. Seguidamente, cúbrelos con el fumet del pescado, agrega unas cucharadas del jugo de cocción de los mejillones, salpimenta y cuécelo todo junto 20 minutos. Transcurrido este tiempo, incorpora la leche y los mejillones; debes reservar algunos para decorar. Rectifica de sal y tritúralo todo con la batidora hasta obtener la crema.
4. Finalmente, calienta la crema de nuevo unos minutos y sírvela bien caliente decorada con los mejillones reservados.

Si deseas una crema más fina, pásala por un colador y espésala, si fuera necesario, con una cucharadita de maicena.